11/06/2020

 

TIPO DE TEXTO Y MODO DE DISCURSO

 

Es un texto periodístico, en concreto, un artículo de opinión ya que el autor da una visión subjetiva de lo que ha sucedido con la censura a lo largo de la historia. Además, está asociado al medio de comunicación “El País” por lo que está relacionado con la actualidad también mediante el uso de extranjerismos (“walkie-talkies”) y siglas (“ET”).

El texto está escrito en un registro estándar debido al uso de un vocabulario sencillo y entendible para todo el mundo, las estructuras sintácticas tampoco son complejas sean simples o no (“Stalin fue un maestro de la manipulación fotográfica.”). Sin embargo, también hay palabras cultas (“cercenada”) que dificultan la comprensión del texto.

Una de las finalidades de este texto es informar. Para ello, a través de la función referencial (“los cuadros del Prado se exhiben con cartelas que explican su origen”) el autor transmite objetividad ya que utiliza la tercera persona (“ordenó”) (“merece”), existe abundancia de adjetivos especificativos y relacionales (“institucionales”). Además de esto, también hace uso de pasivas reflejas (“se retiren”) y la mayoría de sus verbos están en modo indicativo (“había ordenado”).

La función principal de este texto es convencernos. Para ello, el autor manifiesta sus ideas de manera subjetiva mediante el uso de la función expresiva (“Leopoldo II no merece ser honrado en las calles de Bélgica”), verbos en modo subjuntivo (“remontara”) y el empleo de adjetivos valorativos (“indecentes”) (“violento”).

Este texto es expositivo-argumentativo. La parte expositiva abarca las seis primeras líneas, mientras que el resto es la argumentación. La tesis aparece al final del texto, por lo que cuenta con una estructura inductiva (“No hay que confundir la historia con el homenaje en el espacio público”). El escritor nos intenta convencer de que la única solución es respetar los frutos artísticos de cada tiempo, utilizando criterios de autoridad (“ET”) además de argumentos de presunción para razonar su idea (“La sociedad está en permanente evolución”). También hace uso de la función apelativa, mediante ejemplos (“Franco ordenó la destrucción de todos los rastros de exaltación nazi”).

 

Andrea González