2/13/2019

 ”La verdad de las mentiras” de Mario Vargas Llosa.

    Este texto es ensayístico ya que presenta las siguientes características: hace el uso de un registro culto, claro y preciso en los contenidos “las cosas en la literatura”. La temática del texto es la  ambigüedad que presenta la literatura y el lector es el que tiene la última palabra. Aparecen tecnicismos como “irrealidad”. Relacionada con el registro está la función poética ya que se cuida la forma del mensaje utilizando metáforas de gran calidad expresiva, "trampolín que dispara la imaginación en su vuelo impredecible"
    Aunque la principal función de es la expresiva debida a la presencia de la subjetividad utilizando adjetivos valorativos “mezquino” o hipérbatos “Recuerdos e invenciones se mezclan en la literatura de creación” y argumentando ideas muy personales-
    De una forma menos visible también aparecen rasgos de una pretendida  objetividad transmitiendo información a través de sustantivos abstractos como“credulidad”, la tercera persona “Se refería sin duda cómo son las cosas en la literatura”, el modo indicativo y oraciones enunciativas “la literatura es el reino por excelencia de la ambigüedad” evitando la transmisión de emociones.
    También se emplea la función apelativa debida a su parte didáctica, ya que el tema tratado está relacionado con la literatura. Hace el uso de la primera persona del plural “Las cosas no son como las vemos, sino como las recordamos” involucrando al receptor.
     Es un texto expositivo-argumentativo y presenta una estructura deductiva ya que parte de la tesis en el primer párrafo al defender la mezcla de realidad e irrealidad existente en la literatura y continúa con el desarrollo en los dos siguientes en los que se trata el tema expuesto al principio.
    Aparecen varios tipos de argumento como el criterio de autoridad “”Las cosas no son como las vemos, sino como las recordamos” escribió Valle-Inclán”, de presunción “Para casi todos los escritores” o ejemplos “esa fue una contienda que libró y ganó Víctor Hugo, y no la que perdió Napoleón”. Por último el autor utiliza varias fuentes para manifestar su verdad “Los miserables” o “Tirant lo Blanc”.


Sara Delgado.